El Instituto INGENIO, centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Universitat Politècnica de València (UPV), fue seleccionado recientemente para participar en el programa MaX-CSIC (Marco de Autoevaluación y Evaluación de Excelencia Científica y Social-CSIC), una iniciativa del CSIC para mejorar el desempeño de sus institutos y reconocer su excelencia.

En el marco del programa se desarrollará un plan estratégico en el que se identificarán las necesidades del instituto y se diseñará un programa de actuaciones cuyo objetivo es conseguir un estándar de excelencia. El CSIC, tras la evaluación del plan, otorgará financiación para desarrollarlo durante un período de 3 años. Esta semana, los tres grupos de trabajo que están trabajando en la preparación del Max, integrados por casi medio centenar de personas, han presentado sus avances en diversas reuniones al Strategic Advisory Board. El Working Group 1 se ocupa de la parte de investigación del plan estratégico; el WG 2, de impacto social, y el WG3, de los aspectos relacionados con cultura organizacional y entorno.

Jordi Molas, director del Instituto INGENIO, ha comentado al respecto que “se trata de un proceso muy importante para nuestro futuro, ya que perfilará el tipo de organización hacia la cual evolucionaremos”.

Distintivos de excelencia

El proyecto MaX-CSIC contempla la creación de los distintivos de excelencia ASPIRA-MaX CSIC para reconocer el esfuerzo hacia la excelencia de sus centros de investigación, un distintivo que en el mes de marzo ya recibieron los centros adscritos al CSIC que participaron en la experiencia piloto del proyecto a lo largo de 2023: el Instituto de Química Avanzada de Cataluña (IQAC-CSIC), el Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información Leonardo Torres Quevedo (ITEFI-CSIC), la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), el Instituto Geológico y Minero de España (IGME-CSIC), la Institución Milá y Fontanals de Investigación en Humanidades (IMF-CSIC) y el Instituto de Políticas y Bienes Públicos (IPP-CSIC).

Cada distintivo lleva el nombre de una investigadora que ha desarrollado su carrera en una de las tres áreas científicas del CSIC: Josefa Barba, licenciada en  farmacia y doctora en ciencias, desarrolló una prolífica carrera en el campo de las neurociencias y los procesos de aprendizaje; Sagrario Martínez-Carrera, doctora en química, trabajó en el Departamento de Cristalografía del hoy Instituto de Química Física Blas Cabrera y es considerada como uno de los exponentes de la ciencia española de mediados del siglo XX, y Margarita Comas, doctora en biología y escritora,  desarrolló su carrera científica en pedagogía,  destacando por su labor en la introducción de la didáctica de las ciencias en España y la homologación de la mujer y el hombre en el espacio académico.